Decía días atrás esperando la decisión final de la Liga de Fútbol Profesional en torno al caso del Real Murcia, que no las tenía todas "conmigo" y que probablemente al final al señor Tebas y compañia les iba a temblar el pulso y que pudiera ser que se "cagaran por las patas abajo" ante tanta presión que recibían por todos lo costados. Bueno, pues me equivoqué y me podéis decir que soy hombre de poca fe en estos templos del rectángulo futbolístico, y al señor Tebas y compañía les pido disculpas por dudar un tanto del veredicto final. Después de lo leído y escuchado, la justicia futbolística ha funcionado y ha puesto a cada uno en el lugar que le correponde. Pero eso sí: ME ALEGRO QUE MIS DUDAS NO HAYAN TENIDO RAZÓN DE SER.
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